Antiguamente, los casales señoriales mallorquines tenían funciones económicas de vital importancia dentro de la cadena productiva de las familias nobles mallorquinas; eran el punto de distribución de los bienes producidos en las fincas agrícolas, eran despachos, puntos de reunión, centros de mercadeo y la vivienda familiar. Con el paso del tiempo, y con la llegada de nuevos sistemas económicos, estas funciones en los casales señoriales desaparecieron y se convirtieron exclusivamente en las viviendas de las familias acomodadas mallorquinas.
“La familia Cirera, actual propietaria del edificio y de la actividad hotelera, posee este casal señorial desde 1836”
Ca'n Cirera ha acogido a diversos personajes ilustres, tanto de las antiguas familias propietarias (Malferit y Vivot), como de la actual familia propietaria (Rojo de Luis, Mas del Pla del Rei y Cirera).
“Tendrá la oportunidad de conocer la historia de este singular edificio, así como de sus anteriores propietarios más ilustres”
Durante las últimas generaciones, en Ca’n Cirera han vivido personajes como Josep Cirera y Mas del Pla del Rei, fotógrafo y filántropo, cuyas fotografías se pueden disfrutar a día de hoy en el hotel; y también otros como Jaume Cirera i Prim, ingeniero químico, generólogo y bibliófilo catalán, finalmente establecido en Mallorca, creó un archivo muy completo en el ámbito genealógico, por el que fue nombrado Doctor en Honoris Causa de Genealogía y Heráldica.
“La familia propietaria de Ca’n Cirera está estrechamente vinculada a Mallorca y por ello conservan una filosofía de vida muy ligada a su tierra”
En los últimos 20 años, la ciudad de Palma se ha convertido en un destino turístico independiente del turismo de costa y con él, estos casales han podido recuperar su esplendor gracias a la implicación de inversores que han querido transformar en hoteles.
El actual propietario Miquel Cirera i Puig, y su hijo Joan Cirera i Planas, con el objetivo de mantener, restaurar y poner en valor este patrimonio, han impulsado el actual proyecto convirtiendo su casa en un pequeño establecimiento hotelero familiar al servicio de este turismo más cultural; siendo Miquel el responsable de la ejecución de la reforma.
“Se han respetado todos los elementos arquitectónicos de valor y descubierto otros ocultos”
Dicha reforma ha sido llevada a cabo, muy cuidadosamente, por un equipo propio que ha respetado todos los elementos arquitectónicos de valor y descubierto otros ocultos, revaluando el conjunto arquitectónico y dándole una imagen moderna e histórica.
La familia propietaria de Ca’n Cirera está estrechamente vinculada a Mallorca, y siguiendo una filosofía de vida muy ligada a su tierra, ha apostado por la producción propia y local de productos mallorquines como quesos, sobrasada y aceite producidos por Lluis Cirera i Planas en la finca ecológica de Son Cànaves. Para Ca’n Cirera es un honor poder ofrecer a sus huéspedes el sabor más auténtico de estos productos tradicionales de Mallorca.
“Nos ponemos al servicio de la población y abrimos un tesoro escondido de la Palma antigua”
El objetivo actual es compartir este bien histórico y patrimonial, único en Palma, con los huéspedes. Transmitir la relevancia de estos edificios para la Palma más antigua, así como posibilitar que los visitantes puedan disfrutar del encanto y la historia de Ca’n Cirera.